Cómo celebramos la Natividad de Jesús

Todo lo que nos dice este capítulo es de gran importancia. Os lo voy a ir desgranando recordándoos estos dos versículos:

«¿Por qué motivo tus discípulos traspasan la tradición de los antiguos, no lavándose las manos cuando comen pan?» «Y Jesús les respondió: ¿Y por qué vosotros traspasáis el Mandamiento de Dios por seguir vuestra tradición? Pues Dios tiene dicho:» «Honra al Padre y a la Madre;» «más vosotros les decís: Cualquiera que dijere al padre o a la madre: La ofrenda que yo hago redundará en bien tuyo, ya no tiene obligación de honrarle o asistirle.» «Con lo que habéis echado por tierra el Mandamiento de Dios por vuestra tradición.»

¿No os recuerda al Pago de la Bula? Un impuesto eclesiástico que consistía en dar una limosna a la Iglesia en cuaresma a cambio de poder comer carne sin «cometer pecado»…

¡Reflexionadlo todos los que seguís atrapados en las tradiciones! ¿Cómo celebráis la Natividad de Jesús? Pues, lo que nos anunciaron los Profetas dos mil años antes de su nacimiento sobre el bien que nos aportaría, es una realidad.

Por lo tanto, ¡hay que celebrarlo!

Pero en lo que yo quisiera que reflexionarais es en cómo se está celebrando: las familias se reúnen (aunque no se vean a lo largo del año pudiendo hacerlo, ni se comuniquen entre ellos), se compra compulsivamente, hay abundancia de comida, de bebida, de fiesta; en casi todas las casas se monta un belén que, por cierto, poco a poco ha quedado en el olvido y reemplazado por el árbol de Navidad; se cantan villancicos al niñito Jesús. Pero no os olvidéis que el niñito Jesús creció, convivió entre la Humanidad y nos está transmitiendo su mensaje continuamente como Hijo del hombre. Y mientras se celebra su nacimiento ya se está pensando en Semana Santa para celebrar su muerte (con solemnidad, eso sí). Jesús, no dejó dicho que con su imagen y la de su amada Madre La Virgen María se hicieran pasos de procesiones, porque son imágenes que Él prohibió. Además: ¡Qué contrariedad para los más pequeños cuando ven que su niñito Jesús está crucificado! Podéis seguir vuestras tradiciones, pero ¿por qué no incluís también esta otra que os propongo?: Recogeros con respeto para recordar de qué modo fue traicionado Jesús y ¿por qué? Si después de que lo reflexionéis las queréis seguir manteniendo…

“Quien tenga oído que oiga lo que el Espíritu Santo os anuncia”

Con todo mi Amor,

Josefina